Indudablemente el álbum, digital o tradicional, es el mejor muestrario de vuestra boda. Es la mejor manera de enseñar a todo el mundo todo lo que sucedió en el día más importante de vuestra vida.
Aunque siempre entregue los reportajes de boda en formato digital (llave USB), como realmente lucen y se pueden admirar unas buenas fotografías de boda son en formato físico, de forma que las personas que los hojean vayan visionando el reportaje de forma secuencial, ordenada para comprender lo que fue sucediendo. De manera que se cuenta la historia de vuestro enlace matrimonial al detalle, instante a instante; con una selección de las mejores fotografías para no cansar a quienes las están viendo. Que de ver las demás ya tendrán tiempo en sus casas, pues les podéis hacer una copia de todas las incluidas en la memoria USB a quienes estén interesados en tenerlas.
Porque siempre entrego a la pareja todas las fotografías tomadas durante el día de la boda (editadas y a alta resolución), pero en una llave USB. Aparte, conviene separar las mejores para que formen parte del álbum que vais a enseñar a todo el mundo, porque es el mejor muestrario de vuestra boda. Solo las esenciales. Los mejores momentos -que son los que surgen y los esperados por todos (imposición e los anillos, lanzamiento del arroz, el vals de inicio del baile…) merecen presentarse de una manera especial, con la reproducción fiel de los colores que el fotógrafo de boda captó y no con los que aparecen en un monitor que no esté perfectamente calibrado.
Como me caracterizo por ser un fotógrafo de bodas barato, lo que os ahorráis en mi tarifa lo podéis invertir en una cuidada presentación de mi trabajo en un álbum, para que todos los detalles que con tanto cariño y esmero estuvisteis preparando para ese día no queden desmerecidos por una presentación insulsa.
Hay álbumes de muchos tipos, tamaños y estilos. Cualquiera de ellos es interesante, porque el álbum resulta la mejor carta de presentación del trabajo del profesional, y es el mejor muestrario de vuestra boda.
