Podéis conseguir reportajes de bodas económicos contratando un fotógrafo profesional. No hace falta que busquéis a algún conocido manitas si no tenéis demasiado presupuesto para vuestra boda. Como en todas las profesiones, también hay fotógrafos profesionales con tarifas económicas. Solo tenéis que preguntar a vuestros amigos y conocidos, iniciar búsquedas en Internet… y, sobre todo, comprobar su trabajo físicamente.
Un fotógrafo de bodas barato tampoco necesita hinchar los precios para después conquistar a los clientes con rebajas de última hora. Si se caracteriza por entregar siempre reportajes de bodas económicos de calidad, sus muestrarios le avalan. Y los novios interesados comprenderán que merece la pena contratar a ese fotógrafo profesional porque su enlace matrimonial es una situación irrepetible. En estos casos es preferible no arriesgarse por querer ahorrar unos pocos euros.
Si el fotógrafo de bodas es demasiado barato, desconfía. Puede tratarse de un fotógrafo kamikaze, que regale su trabajo por necesidad extrema, pero ese tipo de circunstancia no es muy frecuente. Y la desesperación nunca lleva a buen puerto. Los reportajes de bodas puede ser económicos hasta cierto punto.
Los fotógrafos profesionales manejamos equipos costosos, que tienen que estar al día y en perfectas condiciones. Esto requiere un mantenimiento y, cuando llega el caso, una renovación. Aparte, soportamos otros gastos fijos como tasas, cuotas e impuestos por nuestra actividad.
Por eso siempre insisto en que los novios han de comprobar físicamente los reportajes de bodas económicos del fotógrafo profesional elegido antes de contratarlo. Para comprobar la calidad real de sus fotografías. Las imágenes en las webs necesitan poca resolución. Pueden engañar. Por eso conviene ver en papel esas imágenes que el fotógrafo nos muestra en Internet. Para saber si ese fotógrafo de bodas barato consigue fotografías nítidas, con buen rango dinámico, que puedan ser ampliadas hasta un tamaño razonable
